Hay displasias y displasias. De lo más leve e inofensivo a los casos más graves.
Al igual que cuando vas en coche puedes ir a 121km/h o a 170km/h. Los dos son excesos de velocidad. Pero está claro que una cifra es menos peligrosa que otra. Cuando hablamos de displasia de cadera hay casos de “poca displasia” y casos de “mucha displasia”
En la tabla de la imagen resumo las situaciones que nos podemos encontrar:
– acetábulo bueno (“tipo cuenco”) vs acetábulo displásico (“tipo plato llano”)
– fémur estable vs inestable o luxable
1.- Si el acetábulo es bueno y el fémur es estable: situación normal, no hay problema.
2.- Si el acetábulo es bueno y el fémur tiene laxitud. Es la situación que llamamos de “Barlow +”. Barlow es el nombre de la maniobra de exploración en la que una cadera que vive colocada en el acetábulo se puede sacar hacia posterior al empujarla. Es distinto de la que vive fuera y se recoloca. Se atribuye a una laxitud inherente al recién nacido. Acaba por perderse esa laxitud según pasan las semanas. Hay controversia si es necesario tratar o simplemente observar hasta que ceda esa laxitud. En cualquier caso, son pacientes que vemos en la consulta de traumatología infantil.
3.- El acetábulo es displásico pero no hay inestabilidad. Es la pura “displasia acetabular”. Es decir, falta desarrollo del acetábulo pero no se sale la cadera. Sabemos que si no se desarrolla bien aparecerán problemas de dolor en la 2º-3º década de la vida. Por eso tratamos estos casos. Sin embargo, hay acetábulos “poco displásicos” en los que haremos observación y hay acetábulos “muy displásicos”, en los que instauraremos tratamientos con ortesis de abducción.
4.- Acetábulo malo (displásico) y además inestabilidad. La cabeza femoral vive fuera del acetábulo, pero éste es poco profundo (es como un plato llano) y la cabeza femoral “patina” con facilidad hacia dentro del acetábulo cuandomanualmente la recolocamos. Es la situación que conocemos como “Ortolani +”. Hay que aprovechar la laxitud del recién nacido para recolocar la cadera dentro de la cadera. Lo haremos con la ayuda de un arnés (un tipo de ortesis de abducción) que se mantendrá unas 6-8 semanas). Si van las cosas bien la inestabilidad desaparece en la segunda semana de tratamiento.
El último eslabón de este espectro estaría fuera del esquema. Sería una situación en la que la cadera vive fuera, el acetábulo es malo y no hay la laxitud necesaria para devolver la cadera a su posición correcta dentro del acetábulo. A esto le llamamos luxación teratológica (malformativa) y requiere cirugía: reducción abierta de caderay yeso pelvipédico 3 meses.